MPV (Mínimo Producto Viable)

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Dani García

Informático apasionado por el diseño y desarrollo Web.

Busca lo mínimo para poder empezar tu proyecto.

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Una de las cosas que se estudia en los MBAs cuando se quiere lanzar un proyecto, es centrarse en el MPV, o mínimo producto viable. Es decir hay que buscar lo esencial que permita tener éxito, pero no volverse loco con los detalles y las mejoras, porque sino, nunca llegará la hora de tener un producto que se pueda sacar públicamente.

Un error muy habitual que veo a la hora de querer comenzar un proyecto, especialmente si es tipo StartUp o algún otro proyecto con poca experiencia, y es que se quiere empezar la casa por el tejado. Suele ser muy habitual tener una idea, y lanzarse corriendo a hacer la web, sin validar la idea, ni realizar ningún otro tipo de estudio, análisis, etc.

Lo importante cuando tengamos esa lucecita que se enciende, y tengamos esa super idea de proyecto o negocio, será analizar bien el proyecto, estudiar la competencia, si alguien ya ha tenido una idea parecida nos servirá para aprender de sus éxitos y sus fracasos.

Una vez que tengamos claro como tiene que ser el proyecto, llega el momento de validar la idea, y eso no significa preguntar a tus amigos y familiares que les parece, porque normalmente por apoyarte te darán su aprobación. Así que lo que hay que hacer es buscar gente que sea similar al objetivo de tu proyecto, y valida con ellos la idea, puedes usar una encuesta (en internet hay muchos servicios gratuitos), pero cuidado como haces las preguntas, para no conducir hacia las respuestas que esperas (aunque suena un poco tonto, valida la encuesta porque será tu fuente de información).

No tengas miedo a que te copien, lo importante es validar que tu proyecto está bien enfocado. Te puedes llevar sorpresas, como que tienes en mente que triunfará entre un determinado público y sin embargo lo hace sobre otro diferente a lo que esperabas.

Diseña la marca, el logotipo, y todo lo que será tu imagen (tipología, colores, etc). Nunca olvides, que la marca no es un logo, sino lo que representa, esa imagen de marca (branding), esos valores que quieres transmitir.

Una vez que tenemos todos estos pasos dados, llegó la hora de la verdad, el producto (puede ser un blog, una tienda, un producto que quieras vender, clases, cursos, etc.). Aquí es donde es fundamental que logres definir que es lo mínimo que necesitas para empezar.

Un ejemplo, lo podemos ver en el sector del automóvil, cuando sale a la venta un nuevo coche, normalmente las marcas sacan los modelos más comunes, y poco a poco completan la gama, con otros motores, u otros acabados, etc. Es una forma de comenzar a rentabilizar el producto, y además administrar el esfuerzo, no es lo mismo tener que sacar 15 variantes diferentes, que sacar 5, 5, y 5.

Si queremos crear una web, nos pasará igual, si esperamos a tenerla al 100% pueden pasar meses, sin embargo, si tenemos una buena base, podemos empezar a ir creando contenido poco a poco, ganando público, mejorando el diseño, el contenido, etc.

Así que recuerda, no quieras empezar la casa por el tejado, no te quieras centrar en pequeños detalles y olvides la base del proyecto.

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